En los últimos años muchos países en desarrollo se han convertido en proveedores mundiales de productos agrícolas. Sin embargo, esto se ha logrado muchas veces a través de una explotación indiscriminada de los recursos hídricos y un aumento significativo del riego. Sin un manejo sostenible del riego será imposible mantener la producción agrícola y los beneficios que de ellos se obtienen.
Por ejemplo, el Valle de Ica, en Perú, es ahora uno de los mayores productores de espárragos a escala internacional.
El Departamento de Ica aporta ya más del 3% del Valor Agregado Bruto (VAB) del país, con el auge de la agricultura de exportación. La superficie sembrada de espárrago ha pasado de 400 a más de 10 000 ha en sólo 20 años. También ha crecido la superficie vitícola y de otros cultivos.
Aunque se utilizan aguas superficiales, la mayor parte del riego proviene de aguas subterráneas. La explotación de los acuíferos ha aumentado en la misma medida que el área sembrada.
El uso del acuífero de Ica supera significativamente la reserva explotable (190 hm3/año). Hay una sobre-explotación del 76%, con descenso de la napa freática e incremento de la salinidad del acuífero.
La producción agraria en el Valle de Ica estará muy limitada a largo plazo. Por lo tanto, debe adoptarse un manejo sostenible del riego.
Por otra parte, el Cambio Climático y la variabilidad climática asociada al mismo ha traído una presión adicional sobre la explotación de los recursos hídricos. El Perú es uno de los países más expuestos a la variabilidad climática, asociada a El Niño – Oscilación Sur.
La sobre-explotación de los recursos hídricos se suma a los efectos del Cambio Climático.
Es por eso que el Gobierno del Perú estima que cerca del 70% de las áreas de cultivo estarán afectadas por la escasez de agua en 2021.
La producción agraria en el Valle de Ica aún puede salvarse. Para esto debe adoptarse un manejo sostenible del riego. Debe garantizarse la recarga de los acuíferos y evitar su sobre-explotación extrema.
Actualmente se cuenta con herramientas de simulación hidrológicas y agrícolas. Estos modelos permiten evaluar los riesgos que enfrenta la producción agrícola del Valle de Ica. A partir de las simulaciones pueden encontrarse soluciones sostenibles. Sugerimos seguir un enfoque basado en la norma ISO 22301 con las siguientes acciones:
- Creación de base de datos agrícola.
- Creación de base de datos hidrológica siguiendo los requerimientos de la plataforma FREEWAT.
- Simulaciones agrícolas.
- Simulaciones hidrológicas.
- Propuestas de manejo sostenible del riego en base a los resultados de las simulaciones.
- Análisis de riesgos climáticos.
El procedimiento incluye simulaciones en las zonas saturadas y no-saturadas, teniendo en cuenta el manejo agrícola real desde las parcelas y la situación real de los acuíferos.
Los agricultores y empresas afincadas en el Valle del Ica contarán con una Auditoría del manejo de riego actual, realizada a partir de simulaciones.
Las simulaciones estimarán la eficiencia de riego actual. A partir de los modelos podemos saber en qué medida se satisfacen las necesidades hídricas del cultivo, cuáles son las pérdidas por infiltración y los costes totales en agua y energía. La auditoría establecerá también el sobre-uso de los recursos hídricos y las consecuencias que puede traer. Las propuestas deberán garantizar un manejo sostenible del riego, que conserve las ganancias de los agricultores mientras se protegen los recursos hídricos del Valle de Ica.